"Una frase Millonaria"

"Una frase Millonaria"

viernes, 23 de marzo de 2012

Embajadores del Buen Pie

Se lleva en la sangre. El ADN riverplatense los hace distintos. La siguiente sección buscará mostrarles, a todos los hinchas de la Banda, ¿Qué es de la vida? de esos jugadores que supieron enarbolar, en lo más alto, la bandera de la institución.

El Gran Capitán

Su historia, ya de por sí, es bastante particular. Oriundo de San Lorenzo, Santa Fé, Javier Mascherano fue un jugador emblemático en todas las categorías de inferiores que le tocó participar. “Masche”, tuvo su debut profesional en la selección antes que en el Millonario). Quizás una marca de lo que iba a ser su carrera.

Sparring de la Selección Mayor en el año 2002 (formó parte de todas las categorías juveniles), deslumbró al extraordinario Marcelo Bielsa y el 19 de junio de 2003, se puso la albi celeste en un amistoso ante Uruguay que finalizó 2 a 2. El motivo: la inauguración del estadio Único de La Plata. Un mes y medio después, Manuel Pellegrini no tuvo más remedio y le dio minutos con el Manto Sagrado, en una victoria por 2 a 1 sobre Nueva Chicago. Fueron poco más de dos años en un altísimo nivel. Su performance en River contó con dos títulos locales, una final de Copa Sudamericana y dos semifinales de Copa Libertadores. Un total de 72 partidos y un idilio interminable con la gente. Eran otros tiempos…

Se fue por 15 millones de dólares al Corinthians (Brasil) con su amigo Carlos Tévez. Jugó muy poco, se lesionó y les mostró su carácter a los brasileños. Igualmente, sería parte de un histórico campeón del “Brasileirao”. Un año y medio después, Inglaterra sería su destino. West Ham United, se hizo acreedor de sus servicios, en una operación conjunta con Tévez, en alrededor de 50 millones de euros. Tuvo un semestre de bajo nivel, jugó cinco partidos y en diciembre pidió un cambio. Parecía que el “Jefecito” no volvía a ser.

Y, en ese momento, apareció el Liverpool. Se hizo amo y señor del equipo. Supo compartir el mediocampo con figuras clase A como Xavi Alonso o Steven Gerrard. Disputó 153 partidos y llegó a una final de Champions League, en la que fue elegido como figura. Su estilo de juego llamó la atención de los grandes europeos, pero el destino le tenía deparada una sorpresa. Joseph Guardiola, entrenador del mejor equipo de la historia según mi parecer, quería verlo vestido de azulgrana. Se sentía identificado con su juego. “Masche”, después de un flojo Mundial 2010, se presentó en un vestuario plagado de figuras, comandadas por un tal Lionel Messi. Amigo del rosarino (se conocieron en la Mayor), su adaptación fue mucho más sencilla de lo esperada. En su primer temporada ganó casi todo lo que jugó: Liga española, Champions, Supercopa y Mundial de Clubes. Terminó jugando de titular indiscutido (ya suma 50 partidos en el Barca) y se adaptó a una nueva posición en cancha: defensor central, peleándole el puesto a dos cracks como Gerard Piqué y Carles Puyol. La actual temporada lo encuentra como habitual nombre en el Once y Pep lo considera irremplazable.

Esta fue la historia de un futbolista que superó adversidades y logró hacerse “Jefe” en todos lados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario